Seguidores

viernes, 21 de mayo de 2010

Cap.12.Baile.

-¿Que?- pregunto con fingida inocencia cuando cerré la puerta detrás de mi y mirandolo con ira fingida, no podía odiar a un chico con una mirada como la de él.

-¿Por qué no me lo dijiste?-le demande.

Él se rió ante mi molestia y se incorporo.

- No me ha dado tiempo- contesto.

Eso era cierto, él parecía dispuesto a explicarme lo que su primo planeaba, pero Dylna había aparecido en menos de dos minutos, bueno, por lo menos había sido Romeo el que me había visto en toalla y no Dylan, me ruborice al recordarlo y trate de desviar el tema.

-No quiero que él intente nada, porque yo no le voy a corresponder- eso era cierto, me gustaba Dylan, a cual chica no, tenía una imponente presencia, pero yo no estaba para relaciones ahora, además Dylan sería como un hermano, no como un novio.

-Él lo sabe, tuve que contarle-

Me puse aun roja, ahora Dylan sabía de mi trágica historia de amor.

-¿Por qué?- casi me lamente.

-Por si no te habías dado cuenta mi primo es una persona muy receptor, sabe que algo es diferente en ti, que has sufrido mucho y se a molestado tanto como yo- la ultima parte me confundió.

¿Como que tanto como yo?

-¿Que?- le pregunte para que me explicara.

Suspiro profundamente mientras que se acercaba a mi, el corazón me latía con fuerza, aun no me había tocado pero ya sentía la cercanía de su piel, y la reacción que hubo en mi cunado me tomo de la mano y me guió a la cama y me sentó a su lado.

-Cuando nos vimos en el café la primera vez, pues me sorprendió la reacción....bueno, lo que se disparó en mi, fue como un sentimiento de protección, me preocupe demasiado cuando saliste corriendo, y cuando supe que mi propio hermano te había hecho esa cobardía tenía ganas de que sufriera más que tu, y hoy en la mañana con esas personas murmurando cosas sin sentido, me dio miedo que te bajaras en la primera parada y ya no qusieras tener anda que ver con un D´luna- me explico con su mirada clavada en mis ojos, tratando de anticipar mi reacción.

Yo solo lo mire....

No quería contestar nada, porque no sabía ni que contestar, solo era consiente de la forma en la que me miraba, de que tenía su mano entrelazada con la mía, de que unas ganas que me gritaban por dentro

-¡Besalo!- me gritaba a mi misma.

-No, en menos de media hora vas a salir con su primo- me gritaba mi lado más razonable.

-¿Que importa el primo? él es el que te importa no?- me volvía a gritar.

Ese era el problema, no sabía si Romeo me importaba, algo me gritaba que él era para mi, pero mi sentido común me gritaba más fuerte que mi corazón ya estaba destrozado, para que destrozarlo dos veces...

-Tienes que cambiarte- pareció darse cuenta de que no iba a contestar.

Se levanto, se inclinó y me beso en la frente después sin dar media vuelta se marcho.

Si mi corazón ya estaba roto ahora no quedaba nada de el, era una tristeza cálida, dulce que se sentía en mi pecho debastando mi alma y torturandome.

Una lágrima me rodó en la mejilla.

¡Estúpida!- mis dos sentidos me gritaron, por primera vez estando de acuerdo.

Me levante y me mire en el espejo, mire el vestido negro de baile que mi madre me había comprado y me lo puse, me puse mis zapatillas y me arregle un poco.

Volvieron a tocar y yo fingí una sonrisa al abrir la puerta.

-Hola- me saludo Dylan deslumbrandome con su sonrisa.

-Hola- no me obligue a fingir más, él tenía el poder de hacerme sonreír.

-Lista- me dijo mientras me ofrecía el brazo.

Yo lo tome y cerré la puerta detrás de mi.

Llegamos a la pista de baile del barco, era musica de salsa, genial, mi fuerte, en cuanto entramos Dylan acaparo las miradas de las codiciosas solteras, pero hoy estaba conmigo, me pregunte que estaría haciendo ahora Romeo....

No perdimos tiempo, me tomo de la mano y me condujo al centro de la pista.

El cha, cha, cha era contagioso, Dylan era un excelente bailarin, yo tenía lo mio, pronto las parejas nos abrieron espacio, yo me sumergí en la musica para olvidarme de todo, pronto fuimos solo nosotros dos los unicos ahí, los demás nos observaban, el baile estaba apunto de terminar, de un ágil deslizo puso su mano en mu cintura me levanto y terminamos abrazados, yo respiraba con dificultad, y mi corazón latía a cien, para no perder el equilibrio tuve que poner mi mano en su pecho, comprobé su corazón latía igual.

La gente rompió en aplausos y yo sonreí a Dylan.

Cuando nos ergimos no me soltó la cintura, yo salude tímidamente a la multitud mientras que otro son volvía a sonar, las parejas entraron en la pista yo Dylan me saco de ahí.

-No me malinterpretes, pero me encanto lo que acaba de pasar- me dijo sonriente.

-Si, me he divertido mucho- le fui sincera.

Nos fuimos a cubierta, la noche me golpeaba con su belleza, la luna se reflejaba en la negrura del agua y las estrellas la galardonaban en el cielo igual de negro.

Nos recargamos en el barandal y mire abajo, despues aparte la vista, me imagine callendo ahí y me dieron nauseas.

-No sabía que bailaras tan bien- comento Dylan.

-Se me da, mi madre fue bailarían pero prefirio dirigir una empresa- le conte.

-Mi padre me a dicho que tengo que seguir su ejemplo, seguir en su empresa, con el reinado D´luna- contesto mirando a la negrura del mar.

-¿Y tu que quieres hacer?- le pregunte yo con voz compasiva.

-Yo quiero ser fotografo, viajar por el mundo retratando los bellos paisajes de la naturaleza- me dijo mirandome.

Sus ojos eran identicos a la noche, negros, pero con estrellas estampados en ellos.

- Sigue tus sueños- fue lo unico que le pude decir.

él me dedico una sonrisa torcida.

-Eso are- dijo volviendo la vista al cielo.

Estaba segura que él y yo llegaríamos a ser muy buenos amigos, lo sabía, pero no sabía si yo y Romeo podríamos ser solo eso.





Hoy estaba inspirada, la verdad yo me imaginaba esta historia diferente, pero e superado mis espectativas de mi mis con estos cambios, espero que piensen lo mismo, gracias por leer.

Atte: Alejandra